domingo, 20 de julio de 2008

The Dark Knight



El lunes pasado vi The Dark Knight, la película que más he esperado para este año y solo tengo palabras de elogio para el trabajo de Nolan y Cia. Si, este review parecerá muy (chupapi) chupamedias para quienes no crean que esta pelicula sea la tremenda huea, pero para todas las expectativas que se generaron y que tenía con esta pelicula, puedo decir que la nueva cinta del Hombre murciélago, es el último gran exitazo que tendremos en el año, es algo que además de ser “super entretenida”, es simplemente una gran película que no desilusionará.

Haciendo una sinopsis breve (dentro de lo posible, dura más de dos horas y media): Ciudad Gotica pasa por un periodo en donde los criminales viven con el temor de ser encontrarse con el hombre murciélago, esto ha inspirado, entre otros, al Abogado Harvey Dent para hacer el trabajo de batman, pero en vez del “vigilantismo” de nuestro héroe, Dent decide hacer el trabajo “limpio”, es el hombre que tiene los cojones para llevar a los mafiosos a la justicia y ser la cara de la lucha por una ciudad libre de criminales. Es en Harvey Dent donde todos ven una luz de esperanza para la ciudad, incluso el propio Batman, que a pesar de arriesgar su vida, no es visto con buenos ojos por gran parte de las autoridades y de la ciudadanía, y que ve en el abogado, una forma de pasar la antorcha y de colgar su traje de superheroe para vivir como una persona normal, junto a la única chica que ha amado, Rachel Dawes (quien a seguido con su vida y es nada menos que la actual pareja de Dent).

Pero cuando todo parecía mejorar para La ciudad, un genio criminal (El Joker/Guasón, por si ha vivido en otro planeta) aparece para sembrar el caos y como dice el bueno de alfred “Ver el mundo arder”. Con la aparición de este criminal comenzará la batalla más dura que la ciudad haya vivido y que ni siquiera las fuerzas conjuntas de Batman, Harvey Dent y el comisario Gordon parecen poder detener.


Como se puede apreciar en la “breve” sinopsis, la película no es la típica adaptación de un cómics de superhéroes al cine, algo que ya habíamos visto en Batman Begins, pero que aquí se siente mucho más marcado, se siente más como una película policial, con elementos más cercanos al cine negro (como el Batman de Frank Miller por ejemplo) que cualquiera de las cintas anteriores, y por eso para mí es la mejor, es mucho más jugada es su propuesta, se aleja de varios clichés del cine de superheroes y simplemente es una buena película, no es solo una buena adaptación del cómic, sino que una gran película.

Gran parte del éxito de esta película se debe a los actores, un elenco de peso que está a la altura de las circunstancias incluso cuando su personaje no tenga tanto tiempo en pantalla como los protagonistas.

Primero tenemos a Christian Bale como Bruce Wayne/Batman, un protagonista que es capaz de brillar incluso cuando hay alguien como Heath Ledger que se roba cada escena en donde aparece (pero vamos a eso más tarde).Bale le da el peso y la profundidad que el personaje necesita en esta historia. Si en Batman Begins veíamos el nacimiento del Héroe, aquí presenciamos que consecuencias tiene la aparición del enmascarado tanto en toda ciudad Gótica como en el propio Bruce Wayne y Bale se encarga de darle una presencia especial a Bruce/Batman, en donde no necesitamos voces en off ni nada de esos elementos para entender por lo que pasa el protagonista: Ser Batman le está pasando la cuenta y es el mismo Alfred (Un siempre notable Michael Caine, que le proporciona la naturalidad y calidez que necesita la figura paterna que es su personaje) el que se encarga de recordárselo a Bruce, en una forma de mostrarnos de que Wayne puede ser Batman y todo pero que aún hay cosas que no entiende o que más bien, se niega a entender porque en el fondo siente que está solo en su misión (siendo la “soledad” , interpretada de varias formas, uno de los varios temas y sentimientos del ser humano que trata la película).



Luego tenemos a Aaron Eckhart como Harvey Dent, cuya interpretación se puede ver opacada por Ledger (más adelante pequeño saltamontes), ya que muchos dirán “el guasón estuvo la zorra weon, y el otro igual estuvo bien… pero el guasón estuvo la zorra weonoo!”, pero no hay que subvalorar la importancia del personaje, ya que la historia, aparte de Batman, se centra en su personaje. El guasón (como lo describía Nolan) es una fuerza que se mete “a la mala” en la historia principal, que es Batman y Cia intentando mejorar la ciudad. Bueno, Eckart es perfecto para el papel de Harvey Dent porque tiene cierta pinta de Winner pero cuando eso podría caer mal, el se encarga de darle la “cercanía” que necesita con la audiencia, en donde uno de verdad quiera ver que este “Caballero Blanco” logre sacar a Ciudad Gótica del hoyo en que están metido (por muy feo que eso suene). Pero para quienes siguen a Batman y sus aventuras en otros medios que no sea las películas, ya sabían a lo que iban, sabían el inevitable destino de Harvey y su cruzada y eso es lo peor, Porque Gracias a Eckart, se logra una atmosfera tal que uno no quiere ver a este verdadero salvador, caer en desgracia y convertirse en Dos caras, pero sabemos que se viene y es esa transformación, ese destino inevitable que se va forjando poco a poco el que mantiene en suspenso y la atención con este personaje, lo que no sería posible sin el guión de “Los Nolans” (otro jumbito para el choro chris) y la impecable actuación de Aaron Eckart como Harvey Dent y luego como Dos Caras, en donde este personaje semi-Heróico muere Casi sin dejar rastro de “El caballero Blanco” para convertirse en una suerte de vigilante Vengador que solo perdonará según la suerte de una moneda.



Y Llegamos a quien ha generado la mayor expectación, el Fallecido Heath Ledger como el villano más famoso del Murciélago: The Joker o El Guasón (pa losotro lo boricua!). El actor australiano la tenía difícil: No era la primera opción de nadie para el papel, estaba a la sombra de Jack Nicholson e interpretaba a un personaje icónico no solo de los comics, sino que de la cultura pop. Pero con este papel, el último que pudo terminar, Heath Ledger demuestra que a pesar de todas las dificultades, logró realizar el personaje más memorable de su carrera, el villano definitivo para Batman y me arriesgo a decir, el villano definitivo en cualquier película basada en una historieta y, sin arrugarme, de la historia del cine.

Lo que ha hecho Ledger es sin duda un trabajo magistral en cuanto a actuación, es tanto así que le pago a cualquiera que reconozca algún gesto, muletilla o cualquier cosa que se pueda considerar “Ledgeriana”. El actor está irreconocible, y ha creado un personaje que se pasea por la pantalla con una naturalidad que asusta. Cada gesto, la forma de hablar, de caminar, de simplemente quedarse parado en un lugar, es algo tan único y tan propio de este personaje, que es sencillamente perfecto. El Joker no tiene un origen en esta película (de hecho cuando el habla de su pasado, lo hace con versiones diferentes para cada ocasión aunque alguna que otra cosa se puede deducir), el simplemente está ahí, dejando la cagada, lo que le da aún más “misticismo” a un hombre que parece salido del peor lugar de la tierra y que genera mucha más tensión cada vez que aparece porque no tenemos idea de lo que es capaz (desde la escena del banco, pasando por el truco del lapiz, el atentado contra el alcalde, una bomba dentro de uno de sus secuaces en la comisaría y hasta la destrucción de un hospital), va de mal en peor y nos queda muy claro desde el primer minuto, de que este es un hombre sin límites al que prácticamente no hay forma de parar (“Esto es lo que pasa cuando una fuerza imparable choca con un objeto inamovible”), y es justamente eso lo que usa en contra de nuestros héroes, mientras Batman, Harvey y Gordon buscan llevar a los criminales a la justicia, el Joker se encarga de probarles una y otra vez de que eso no sirve de nada y que para detenerlo deberán “Romper su única regla” (la única que prácticamente mantiene a Batman fuera del grupo de los ”criminales”). Todo esto no tendría el mismo impacto si no fuese por la interpretación de Heath Ledger, quien, como la antitesis de Batman (un hombre sin reglas) está completamente metido en su papel, que recuerda a esos actores de carácter que se convierten totalmente en su personaje y que aunque los fans ya vivimos el “duelo” de su muerte, en estos momentos lo recordamos con más nostalgia, como alguien que probó en sus últimos años que lo mejor de el estaba por venir, pero que a su vez dejó un interesante legado de interpretaciones que terminó a lo grande, en un papel que según sus propias palabras disfrutó más que cualquier otro, lo que se nota en cada segundo que tiene en pantalla. Gracias Heath Ledger.




En esta historia tambien vuelven personajes como el (ahora sí) Comisario Gordon (Gary Oldman) en un papel mucho más importante que en Batman Begins y mucho más sólido también, y es que no hay mucho que decir con alguien como Oldman, es alguien del que ya sabemos lo genial que es y aquí no se queda atrás, llevando a su personaje al otro nivel, al que vimos formarse en la película anterior pero que es aquí donde ya es un personaje consolidado y con una carga dramática mucho más pesada (que pajero suena eso, como de crítico pseudo intelectual) El comisario Gordon es de los pocos policías honestos que quedan en la ciudad (y casi el único que cree en sus demás compañeros), es el primero en pensar que Harvey Dent es el héroe que necesita la gente y el único que cree en Batman hasta el final, es por eso que también se puede considerar un personaje “trágico” (otro más) en cierto sentido, ya que al final, es el que tendrá que ir en contra de lo que cree correcto para preservar lo logrado por el bien de la ciudadanía.

Luego tenemos a Rachel Dawes interpretada por la extrañamente guapa Maggie Gyllenhaal, quien le da mayor peso a un personaje al que Katie Holmes no le puso la energía suficiente (y esto viene de alguien a quien no le cargó la mina), ahora vemos a una Rachel mucho más decidida (le hecha “la foca” hasta al guasón) y mucho más importante para la película que antes y que juega un rol fundamental para los hecho que suceden hacia el final de la historia. Por último está Morgan Freeman que vuelve como Lucius Fox haciendo un papel pequeño (si lo comparamos con los demás), pero como todos los personajes en esta historia y como no sucede muy a menudo, que encaja perfectamente y no parece un relleno más. Lucius Fox actúa como parte de la conciencia de Bruce al igual que alfred y Morgan Freeman como siempre genera esa Templanza que te haga creer en sus palabras.

Me Falta escribir sobre el cerebro detrás de esta magna obra del cine, el maestro de Orquestas: Christopher “Me gusta cagarle la onda a las personas cuando creen haberlo visto todo y les entrego algo mucho mejor” Nolan. Un tipo que a mi parecer tiene una carrera impecable, que con muy poca plata o con presupuestos millonarios, es capaz de hacer algo increíble y que aparte de saber contar buenas historias en la pantalla, es uno de los mejores guionistas que existen en el loco mundo de “Joligud” hoy por hoy (tambien demosle el crédito a su Hermano Jonathan obviamente). Nolan sabe lo que quiere en su pelicula y nos lo enrostra con cada escena durante las dos horas y media de duración (las cuales gracias a un guión que engancha, un montaje que mantiene el ritmo, buenas actuaciones y buena dirección, no se hacen para nada largas). Ya sea con secuencias como el asalto al banco, o los planos generales de la ciudad que (dándomelas de experto usando tecnicismos pajeros) tienen una fotografía que, es impecable en toda la película y muy propia de la cinta, pero que en esos planos exteriores es nada menos que Brillante.

En resumen, Cagó todo… La película es una obra maestra. Puede sonar exagerado, o como dije al principio muy “chupapi” pero es lo que de verdad siento, cada aspecto de la película cae en su lugar con precisión milimétrica para entregarnos una de las propuestas cinematográficas más interesantes del último tiempo. Una película que marcará un antes y un después en adaptaciones del comics al cine porque logra ser mucho más que eso, es una cinta oscura que nos muestra sin tapujos la delgada línea entre el bien y el mal, representados por personajes que en cualquier momento pueden tener un mal día y mandar a la basura todo por lo que lucharon y eso es algo que le puede pasar a cualquiera porque Todos tenemos nuestros valores y cierta moral para enfrentar situaciones, pero cualquier día un hecho puntual puede cambiar nuestra forma de pensar y por mucho que uno quiera negarlo, no sabremos hasta ese día preciso de lo que somos capaces de hacer. La película te mantendrá atento a pesar de ser bastante larga, tiene un ritmo que no para y que va creciendo junto al caos que comienza a reinar en ciudad gótica (Atentos a los discursos del Joker sobre este tema, es tan convincente que hasta le empecé a encontrar razón, atentados y muertes de lado por supuesto) El caos que cambiará a la ciudad y a sus más arriesgados defensores para siempre.

PD: Mención aparte merece el truco del lápiz del Joker y el montaje final, Épico (notese mayúscula), como pocos.

PD 2 :Para quienes creen que la atención con la actuación de Heath Ledger es exagerada, que la nominación al oscar es un capricho de los fanáticos que desean un premio de la academia para el actor solo porque murió. Vean la película antes de opinar, luego sacan sus conclusiones. Lo que es yo, pienso que es obligación que por lo menos sea nominado, su muerte fue una lástima, pero no es por eso que me gustaría ver que ganara, sino porque su trabajo en esta película es algo que no se ve en cualquier cinta, es algo que solo una persona con un talento especial es capaz de realizar y por eso debe ser reconocido.